La erupción del volcán submarino Hunga Tonga-Hunga Ha’apai, que devastó el archipiélago de Tonga, fue 500 veces más poderosa que la bomba atómica lanzada sobre Hiroshima, Japón, en la Segunda Guerra Mundial, afirmó un investigador de la NASA.
James Garvin, científico jefe del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA, dijo que el poder de la erupción fue equivalente a unos 10 megatones y ha sido la mayor de las últimas décadas, la cual se pudo registrar hasta Alaska, a 9 mil kilómetros de distancia.
Una serie de imágenes satelitales mostraron el antes y el después de los daños que causó en casas y edificios la reciente erupción del volcán submarino de Tonga, ubicado en el Pacífico Sur, así como el tsunami que trajo como consecuencia la actividad del coloso.
Tras la explosión, la compañía de infraestructura espacial, Maxar Technologies, dio a conocer una serie de imágenes satelitales en las que se puede apreciar cómo el archipiélago del Pacífico quedó cubierto de cenizas después de la erupción, dejando casas, carreteras e instalaciones portuarias en la capital de Tonga, Nuku’alofa, asentadas en un paisaje ceniciento.
En las primeras imágenes mostradas se observa cómo la zona en la que se encuentran las principales instalaciones portuarias, la cual hasta antes de la erupción volcánica lucía un color azuloso por el agua del mar, ahora se encuentra totalmente cubierta de ceniza, dándole un tono entre gris y negro a los techos de las construcciones.
Una segunda serie de imágenes proporcionadas por Maxar Technologies muestra cómo el paisaje habitual conocido por sus grandes extensiones verdes, ahora luce irreconocible por la ceniza emitida por la actividad del coloso, la cual dejó sumida en una total oscuridad la zona habitada de Hunga Tonga-Hunga Ha’apai.
Casas y edificios antes de la erupción del volcán de Tonga. Casas y edificios después de la erupción del volcán de Tonga.
Imágenes de satélite muestran el volcán Tonga antes y después de la erupción
En un video difundido por la agencia de noticias Reuters por cortesía de la Unión Europea, se aprecia una primera imagen fija tomada por el satélite Copernicus Sentinel-1 de cómo lucía la isla Hunga Tonga Hunga Ha’apai con una estructura amorfa, antes de la erupción volcánica.
Mientras que una segunda imagen tomada el sábado 15 de enero por el mismo satélite, unas 12 horas después de la erupción, muestra que la isla volcánica de Ha’apai, la cual se encontraba deshabitada, había desaparecido tras la explosión.
En las imágenes también se muestra una segunda toma más definida de lo que era la isla de Tonga antes de la erupción; en ella se observa perfectamente el territorio que comprendía la isla, seguida de una imagen en la que se presenta, en contraste, el espacio vacío señalizado con un contorno que representa el sitio que ocupaba.