Científicos de la Universidad de Australia Occidental y Kelpie Geosciences en el Reino Unido lograron captar en video un calamar con “luces” en sus brazos, que habita las aguas profundas del océano Pacífico, así lo dio a conocer la casa de estudios en un comunicado de prensa este jueves 16 de mayo.
Calamar con luces, ¿cómo es?
Se trata de una rara especie de molusco llamada “calamar anzuelo” o Taningia danae. Fue vista el pasado 8 de mayo a una profundidad de más de un kilómetro bajo el agua, al norte de un área llamada Pasaje de Samoa. Se estima que medía alrededor de 75 cm de largo.
[TE PODRÍA INTERESAR: Buzos graban calamar gigante vivo en extraño avistamiento en costas de Japón]
El momento de su filmación ocurrió mientras el fotóforos rodeaba con sus brazos una cámara que se hundía y que había confundido con una presa.
Sin embargo, lo verdaderamente sorprendente de este hallazgo es que en los extremos de dos brazos del calamar se observaron brillantes “luces” bioluminiscentes utilizadas para asustar a sus presas, los cuales, la investigadora Heather Stewart comparó con un par de “faros”.
“El calamar, que medía unos 75 cm de largo, descendió sobre nuestra cámara suponiendo que era una presa y trató de asustarlo con sus enormes faros bioluminiscentes. Luego procedió a rodear con sus brazos una de las otras cámaras que a su vez capturaron el encuentro con mayor detalle. Creo que tuvimos mucha suerte de haber sido testigos de esto”, dijo Stewart.
[TE PODRÍA INTERESAR: Hallan un calamar gigante en plena costa ¡Mide más de 3 metros!]
El calamar anzuelo es uno de los calamares de aguas profundas más grandes. Es famoso por tener dos fotóforos muy grandes en el extremo de dos de sus brazos, que producen brillantes destellos bioluminiscentes para asustar y desorientar a sus presas cuando cazan. Estos son los fotóforos más grandes conocidos en el mundo natural.
El profesor Alan Jamieson, director del Centro de Investigación de Mares Profundos Minderoo-UWA, dijo que observar calamares de aguas profundas en su hábitat natural, especialmente en la mitad del agua, era un desafío notorio.
“Muchos registros de esta especie provienen de varamientos, capturas incidentales accidentales o del contenido del estómago de ballenas”, dijo Jamieson.