Los humedales de la península de Yucatán se engalanan de rosa con el espectacular plumaje del flamenco americano, una increíble ave llena de enigmas. Conoce más de esta sorprendente especie que es parte de la campaña “Somos guardianes” de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), cuyo objetivo es promover la participación ciudadana en el conocimiento, valoración y respeto de la naturaleza mexicana.
¿Flamenco o flamingo?
Estas fascinantes aves rosadas suelen ser llamadas flamencos o flamingos, sin embargo, el nombre correcto en español es “flamenco”, palabra que hace referencia a la manifestación cultural española y a este animal.
- Su nombre significa “llama” o “flama” debido a su color rojo fuego.
Sin embargo, flamingo tampoco es del todo errado, ya que es el nombre que se da a este animal en inglés.
Los flamencos son color ¿blanco?
Los flamencos no son rosas de nacimiento, de hecho, según la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), al nacer los polluelos son blancos o en su defecto grises, y es gracias a sus hábitos alimenticios que adquieren su característico color rosado.
Según los expertos, los flamencos se alimentan de crustáceos, los cuales tienen grandes cantidades carotenoides, es decir, pigmentos que dan color, entre otras cosas, a vegetales como las zanahorias.
¿Cómo son los flamencos?
La familia de los flamencos se llama Phoenicopteridae. Todos comparten características físicas como la forma curvada del pico, las piernas largas, los dedos palmeados y el plumaje rosado con variaciones de tono. No obstante, los taxonomistas han descubierto que actualmente existen seis especies distintas.
De acuerdo con sitios de conservación de esta ave, aunque la altura de los flamencos depende de la especie a la que pertenezcan, aunque es común que el macho sea más alto que la hembra. En promedio, la altura adulta es entre los 1.10 m y 1.5 m, mientras que su peso es de 2.4 kilogramos hasta 4 kilogramos.
Este residente local de la península de Yucatán vuela en grupos desplegando su largo y elegante cuerpo, preferentemente de noche, y es capaz de alcanzar velocidades de poco más de 56 km/hr.
Sus largas y delgadas patas terminan en tres dedos que se unen entre sí por una membrana llamada interdigital, que les ayuda a caminar en el lodo y utilizarlas como remos al nadar.
Suelen descansar de pie, habitualmente sobre una sola pata, la cual van cambiando de posición inconscientemente mientras duermen. Esto se debe a que se cree que una parte de su cerebro sigue despierto, mientras que la otra mitad permanece en total descanso.
Gracioso y ágil, el flamenco tiene ojos con una coloración naranja y son más grandes que su cerebro. Se comunican vocalmente con un tipo de sonido similar al de los gansos y son capaces de soportar grandes concentraciones de sal en el agua, incluso más altas de las que hay en el mar.
Respiran aire, pero pueden aguantar sorprendentemente la respiración mientras se encuentran bajo el agua en busca de alimento, ya que son aves filtradoras, lo que quiere decir que utilizan su pico curvado para filtrar el agua para alimentarse. Además, pueden sumergir su cabeza debajo del agua para mover el fondo con el pico y obtener alimento.
Los flamencos tienen sus picos al revés mientras se alimentan durante varias horas al día, esto lo hacen para poder filtrar su alimento mientras flotan sobre las olas de agua.
La mayor parte de su cuerpo es pálido, mientras que la superficie superior de sus alas es de tono más intenso adquiriendo un color rojo. En el resto del cuerpo su plumaje es rosado.
Su etapa de apareamiento comienza después de sus primeros seis años de vida y las hembras ponen un sólo huevo en el nido debido a que es de gran tamaño. Su incubación dura alrededor de 30 días.
¿Dónde habitan?
Sus hábitats son las lagunas costeras de baja profundidad y agua salada, marismas, salinas, estuarios y lagos alcalinos, pero en ocasiones se les ve en zonas de tratamiento de aguas residuales.
A pesar de que disfrutan de lugares salados, también les gusta el barro, ya que les permite acceder a su comida sin tener que entrar a las profundidades del agua.
Peligro de extinción
Los flamencos aún no son considerados un tipo de ave en riesgo de peligro de extinción. Sin embargo, esto puede llegar a ocurrir por amenazas de depredadores, principalmente humanos debido a la caza furtiva de las plumas ornamentales que poseen estas hermosas aves.
Otros factores pueden ser la pérdida de hábitat que conlleva temas como calentamiento global, contaminación, entre otros.
Los flamencos en la historia
En la cultura egipcia, los flamencos representaban al dios Ra, conocido como el dios del Sol, de ahí que dedicaran grandes esfuerzos a su preservación.
