El Fury 69 es un vehículo eléctrico que ha logrado obtener podio en todas las carreras en las que ha participado, incluyendo algunas del Campeonato Nacional Electratón. En dicha justa se dan cita diversas escuderías de escuelas privadas y públicas del país.
El vehículo fue creado por jóvenes mexicanos, estudiantes del Centro Educativo Grupo CEDVA de Tlalnepantla, Estado de México, quienes forman parte de la escudería Leones Blancos, la cual ha ganado, con su Fury 69, la mayoría de las carreras en las que ha participado dentro y fuera del Electratón.
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El Electratón es una competencia cuyo objetivo es conceptualizar, diseñar, construir y correr en pista con un vehículo tripulado de propulsión eléctrica. El Fury 69 se ha llevado todos los primeros lugares en las carreras en las que ha participado, a excepción de un segundo lugar, por lo que sus jóvenes creadores no se han bajado del podio.
Ingeniería automotriz en México pinta para ser fuerte a nivel internacional
UnoTV platica con el piloto del Fury 69, Diego Marciano Hernández, quien también participó en su diseño y quien señala que en la escuela que vio nacer el vehículo siempre tratan de estar a la vanguardia en el plano automotriz.
“Tratamos de no quedarnos atrás como escudería, tenemos un propósito que es aprender y con nuestro ingenio presentar proyectos que son de gran relevancia para México, porque, de alguna forma, sabemos que la ingeniería automotriz en nuestro país puede ser fuerte a nivel internacional”.
Diego Marciano Hernández / Piloto del Fury 69.
Al narrar la historia del emblemático auto de carreras, Diego cuenta que debido a que lleva seis años compitiendo, este ya se encuentra retirado, sin embargo, trabajan en un nuevo prototipo con mayor tecnología, como alerones electrónicos y lectura de baterías, “porque ya ahorita lo que está en auge es el ion de litio… Tenemos contemplado hacer nuestros bancos de baterías y hacer las pruebas con los BMS, las computadoras que se utilizan para estos vehículos”, abunda.
“Fury 69 fue un prototipo para poder participar en el Electratón. Es un auto con el cual renovamos las tecnologías para las competencias, fue más ligero que su antecesor y con mayor aerodinámica. Fue de los primeros vehículos que trabajó con un alerón que fue funcional en pista, en competencia. Como es eléctrico, el enfriamiento del motor fue por líquido, cuando las demás escuderías lo tenían por aire”.
Diego Marciano Hernández / Piloto del Fury 69.
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El joven ingeniero abunda que la primera vez que los invitaron a competir, el Fury no se había terminado al 100%, sin embargo, se presentó y ganó, lo que les dio la oportunidad de seguir participando en más carreras en las que, a lo largo de cuatro años, ha obtenido campeonatos ininterrumpidos.
“En Electratón la intención es demostrar que con la energía eléctrica podemos hacer grandes cosas y lo hemos demostrado. El Fury 69 tiene una velocidad máxima de 120 km/h. Es un vehículo muy rápido. Nosotros lo que hacemos es ir tratando de mejorar estas capacidades. Actualmente, trabajamos ya en otro nuevo vehículo al cual queremos meterle más tecnología, que tenga tres motores de propulsión, uno que es el principal, el cual lo manufacturamos aquí en la escudería”, señala el piloto.
Hasta ahora, narra el joven, el Fury 69 es uno de los más veloces en su categoría que han existido y dentro de los planes para su sucesor están el de fabricarle un monocasco con fibra de carbono.
“Son pocas las escuderías que se meten en este tema de la fibra de carbono. Las Fórmulas SAE son los que más trabajan en estos monocascos, pero en Electratón nadie se ha metido en estos temas, por lo que queremos ser los primeros en demostrar y presentar este proyecto eléctrico 100%, con un monocasco de fibra de carbono”, destaca Diego.
Al hablar de los costos para diseñar y construir este tipo de automóviles, el joven piloto destaca que si bien se ven pequeños, lo cual daría a pensar que no implican un gasto mayor, la verdad es que, a grandes rasgos, cada vehículo puede tener un costo de entre 100 y 300 mil pesos.
“Nosotros como escudería tratamos de buscar las formas de financiamiento; afortunadamente la escuela nos apoya. Nosotros hacemos pequeños proyectos como triciclos drift o pequeños carros, tipo baja, todoterreno, para poder sacar recursos e invertirlos en vehículos como el Fury 69. De la misma manera, tratamos de acercarnos a las empresas para mostrarles nuestros proyectos, lo que desarrollamos, en búsqueda de apoyo con patrocinios, que es la forma en la que tratamos de seguir con los proyectos. Aprovechamos el acercamiento con empresas que estén interesadas para también promovernos como estudiantes y tener un nicho laboral cuando egresemos de la carrera”.
Diego Marciano Hernández / Piloto del Fury 69.
El lugar donde se construyó el Fury 69 es una escuela de grupo CEDVA que está en Tlalnepantla, Estado de México. Se especializa en ingeniería mecánica, automotriz e ingeniería electrónica. También se forman técnicos a gasolina y diésel: “Es una escuela que se ha dedicado al entorno automotriz al 100% y nos han apoyado bastante con esta escudería para poder participar en las competencias y poder destacar como estudiantes a nivel nacional e internacional”, destaca Diego.
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Actualmente, en dicho plantel educativo, los estudiantes trabajan en otro proyecto, un Baja SAE, con el cual también esperan alcanzar grandes logros en las competencias en las cuales participen.
Baja SAE es un programa de competencias en donde estudiantes de ingeniería se dan a la tarea de diseñar y construir un vehículo deportivo, monoplaza, todoterreno.
Sobre su éxito en las carreras en las que han participado, Diego considera que tiene mucho que ver con las condiciones en las que presentan su vehículo para que nunca falle.
“Cuando estamos en una competencia nunca ha fallado uno de nuestros vehículos. Nunca ha salido a pits por fallos o porque algo nos salió mal. Ya cuando estamos en la carrera es enfocarse a eso y disfrutarlo”, considera.
Checo Pérez, una inspiración
Al hablar sobre la situación actual en el automovilismo profesional, Diego confiesa que en la escudería se declaran fans de Sergio “Checo” Pérez, quien se ha convertido en una inspiración para ellos.
“Checo Pérez es una de las grandes figuras del automovilismo que está pegando bastante fuerte en este deporte, lo cual es una gran inspiración para nosotros como ingenieros, estudiantes y como aspirantes a trabajar dentro de cualquier área relacionada con el automovilismo”.
Diego Marciano Hernández / Piloto del Fury 69.
A las nuevas generaciones que se quieran inmiscuir en la ingeniería automotriz, Diego, quien confiesa que está cumpliendo una de sus metas al pilotar un auto de carreras, los llama a enfocarse en lo que quieren y a ser persistentes en lo que, en verdad, les gusta.
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“Si en este caso les gusta el automovilismo hay que buscar las formas. Siempre se puede llegar, desde este lado de la ingeniería, a construir un carro, ser piloto; si no se cierran, uno puede llegar a grandes logros”.
Diego Marciano Hernández / Piloto del Fury 69.
“En nuestro caso, como escudería, siempre nos damos ánimos porque es difícil conjuntar el trabajo de diseño con las carreras, las materias de la escuela y la construcción de nuevos proyectos. Afortunadamente, hemos dado buenos resultados, lo hemos demostrado”, enfatiza el piloto.
La escudería Leones Blancos participará en una carrera en Fórmula E el 13 de enero en el Autódromo Hermanos Rodríguez: “Nos invitaron y abriremos con una pequeña carrera de media ahora. Ahí demostraremos lo que traemos como escudería”, señala Diego.