De acuerdo con Educación Inicial de Fundación Carlos Slim, dormir bien es esencial para la salud y el desarrollo de los niños y de todos los seres humanos por lo que es importante generar hábitos y rutinas que favorezcan un buen descanso.
Los niños que no duermen bien pueden desarrollar problemas de memoria, actitud y son propensos a desarrollar transtornos de comportamiento e irritabilidad, bajo rendimiento escolar, y hasta padecer sobrepeso.
Por eso es importante que los padres ayuden a sus niños a desarrollar buenos hábitos de dormir desde una edad temprana, inculcándoles una rutina bien asentada que permita que los menores obtengan un descanso ideal que ayudará a su desarrollo.
Beneficios de dormir bien
Durante ciertas fases del sueño se llevan a cabo procesos importantes que favorecen la maduración cerebral, también se realiza la reparación de tejidos corporales y cerebrales favoreciendo la memoria, reorganizando las neuronas comprometidas en el procesamiento de aprendizajes adquiridos durante el día, señala Educación Inicial de Fundación Carlos Slim.
El cerebro selecciona recuerdos significativos y elimina u olvida aquellos que no lo son para mantener en equilibrio y orden el almacenamiento de la información.
El sueño profundo está relacionado con el favorecimiento y desarrollo de la creatividad de los niños, ya que promueve la combinación de pensamientos, utilizando la imaginación, lo que facilita la aparición de nuevas ideas.
Dormir bien favorecer el desarrollo de los niños porque el cerebro segrega diferentes sustancias involucradas en regular algunas funciones del organismo: por ejemplo, la hormona del crecimiento o funciones relacionadas con el sistema inmune; así mismo durante el descanso nocturno los niños recuperan y conservan la energía necesaria para continuar con sus actividades diarias.
¿Cuántas horas deben dormir los niños?
- 0 a 3 meses: 14 -17 horas.
- 4 a 12 meses: 12 -16 horas.
- 1 a 2 años: 11 – 14 horas.
- 3 a 5 años: 10 – 13 horas.
Tips para que los niños logren tener un buen sueño y descanso
- Dormir en un lugar que tenga las condiciones apropiadas; sin luz, tranquilo y con buena temperatura.
- Acostarse y levantarse siempre en el mismo horario, incluso hay que mantener la rutina los fines de semana o que sea similar.
- Diseñar rituales para facilitar el sueño, por ejemplo: caricias, masaje, mimos o una canción de cuna.
- Pasar tiempo con el o la menor, puedes leerle un cuento, hacer un rompecabezas, dibujar, iluminar, etc.
- Cenar algo ligero que facilite su digestión y, por tanto, su descanso.
- Evitar la exposición a cualquier tipo de pantallas antes del descanso (3 horas) ya que la luz y el ruido lo mantendrán activo.
- Que no realice actividades físicas a últimas horas del día, ya que esto dificultará su relajación a la hora de dormir.
Acompaña y guía a los niños en este proceso de manera amorosa, paciente y comprensiva, a medida que crezcan, este ritual puede ir variando y poco a poco los niños podrán realizarlo más fácilmente; de esta manera desarrollar una buena higiene del sueño que perdurará a lo largo de su vida.