España reanudó este miércoles la vacunación contra COVID-19 con AstraZeneca tras haberla suspendido desde el 15 de marzo por supuestos efectos adversos.
El gobierno español y las autoridades regionales acordaron que la administración de la vacuna de AstraZeneca se amplía a los trabajadores esenciales con edades entre los 55 y los 65 años, como bomberos, policías y maestros.
“Reiniciamos la vacunación. Se suprime el límite de edad establecido a los 55 años y se amplía hasta los 65 años”, informó en rueda de prensa la ministra de Sanidad, Carolina Darias.
Cuando el regulador europeo aprobó su uso en enero, España decidió que únicamente se administraría a personas de hasta 55 años debido a la escasez de datos de ensayos clínicos en grupos de personas de mayor edad.
Desde entonces su uso en personas mayores se ha probado que es eficaz y varios países decidieron aumentar el rango de edad para la aplicación de la vacuna de AstraZeneca.
“Las vacunas, como había dicho en otras ocasiones, son seguras, son eficaces y salvan vidas“, enfatizó la ministra Carolina Darias.
El jueves de la semana pasada, la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) estimó que dicha vacuna era “segura y efectiva”, lo que llevó a varios países a reactivar su uso o hacerlo en breve como es el caso de España.
Aun así, un sondeo publicado este lunes en el Reino Unido mostró que los europeos seguían escépticos sobre la seguridad de este inmunizante.
La reactivación del suministro de las dosis de AstraZeneca debe acelerar el proceso de vacunación en España, que aspira a haber protegido a un 70% de la población a finales del verano.