El Sol emitió una llamarada solar de tamaño significativo el pasado 16 de abril de 2022, alcanzando su punto máximo a las 12:34 horas de la Ciudad de México, así lo dio a conocer el Observatorio de Dinámica Solar de la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA), quien logró capturó en imagen el evento.
La reciente llamarada solar captada por el equipo de la NASA fue clasificada como una bengala Clase X, las cuales se caracterizan por denotar destellos más intensos, mientras que el número proporciona más información sobre su fuerza.
Llamaradas solares poderosas
Esta llamarada solar de relevancia significativa se suma a la reciente bengala, también Clase X, que presentó el Sol el pasado 30 de marzo y la cual fue lograda captar en video por la NASA.
Así como a la ocurrida el 15 de febrero, cuando una impresionante llamarada solar se extendió millones de kilómetros en el espacio, la cual fue capturada en imagen por la Órbita Solar de la Agencia Espacial Europea (ESA) y la NASA, quienes aseguraron que se trató del evento más grande su tipo registrado hasta ese momento.
¿Qué son las llamaradas solares?
Las llamaradas solares son poderosas explosiones de energía emanadas del astro rey, éstas al igual que las erupciones solares pueden afectar las comunicaciones por radio, las redes de energía eléctrica, las señales de navegación y presentar riesgos para las naves espaciales y los astronautas.
Cuando ocurre una llamarada solar lo suficientemente fuerte, se produce ionización en las capas inferiores y más densas de la ionosfera y las ondas de radio que interactúan con los electrones en las capas pierden energía debido a las colisiones más frecuentes que ocurren en las capas superiores.
Las erupciones solares suelen tener lugar en regiones activas, que son áreas del Sol marcadas por la presencia de fuertes campos magnéticos; típicamente asociado con grupos de manchas solares . A medida que estos campos magnéticos evolucionan, pueden llegar a un punto de inestabilidad y liberar energía en una variedad de formas. Estos incluyen la radiación electromagnética, que se observan como erupciones solares.
Según la NASA, estas grandes erupciones de radiación electromagnética del Sol pueden llegar a durar de minutos a horas. El estallido repentino de energía electromagnética viaja a la velocidad de la luz, por lo tanto, cualquier efecto sobre el lado iluminado por el sol de la atmósfera exterior de la Tierra ocurre al mismo tiempo que se observa el evento.