El telescopio espacial Hubble de la NASA detectó el que podría ser el cometa más grande jamás visto por los astrónomos, cuya masa se estima en la asombrosa cifra de 500 billones de toneladas, cien mil veces mayor que la masa de los cometas habituales que se encuentran mucho más cerca del Sol.
Se trata del cometa gigante, C/2014 UN271 (Bernardinelli-Bernstein), el cual fue descubierto por los astrónomos Pedro Bernardinelli y Gary Bernstein en imágenes de archivo del Dark Energy Survey en el Observatorio Interamericano Cerro Tololo en Chile.
De acuerdo con la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA) el tamaño del núcleo helado de este gigantesco cometa tiene un diámetro estimado es de aproximadamente 130 kilómetros de ancho, lo que significa que es unas 50 veces más más grande que el que se encuentra en el corazón de la mayoría de los cometas conocidos.
Hasta antes de conocer al cometa C/2014 UN271, el más grande que se conocía era el cometa C/2002 VQ94, con un núcleo estimado en 95 kilómetros de diámetro, el cual fue descubierto en 2002 por el proyecto Lincoln Near-Earth Asteroid Research (LINEAR).
“Este cometa es literalmente la punta del iceberg de muchos miles de cometas que son demasiado débiles para detectarlos en las zonas más distantes del sistema solar”, dijo David Jewitt, profesor de ciencia planetaria y astronomía en la Universidad de California, Los Ángeles. Angeles (UCLA).
Jewitt también dijo:
“Siempre hemos sospechado que este cometa tenía que ser grande porque es muy brillante a una distancia tan grande. Ahora confirmamos que lo es”.
Según la NASA, el cometa más grande jamás antes visto fue observado por casualidad por primera vez en noviembre de 2010, cuando estaba a casi 5 mil millones de kilómetros del Sol, que es casi la distancia promedio a Neptuno, y desde entonces, ha sido intensamente estudiado por telescopios terrestres y espaciales.
¿Cómo fue posible descubrir el gran cometa?
Man-To Hui, de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Macao, Taipa, Macao señaló que siempre “supusieron que el cometa podría ser bastante grande, pero necesitábamos los mejores datos para confirmarlo”, por ello fue que se dispuso utilizar el Hubble para tomar cinco fotos del cometa el 8 de enero de 2022.
El reto al medir este cometa fue cómo discriminar el núcleo sólido de la enorme coma polvorienta que lo envolvía. El cometa está actualmente demasiado lejos para que el Hubble resuelva visualmente su núcleo. En cambio, los datos del Hubble muestran un pico de luz brillante en la ubicación del núcleo.
Hui y su equipo hicieron un modelo informático de la coma circundante y lo refinaron para que se ajustara a las imágenes del Hubble. Después, se restó el brillo de la coma para dejar atrás el núcleo estelar.
Las nuevas mediciones del Hubble están cerca de las estimaciones de tamaño anteriores del Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA) en Chile , pero sugieren de manera convincente una superficie del núcleo más oscura de lo que se pensaba anteriormente. “Es grande y más negro que el carbón”, dijo Jewitt.
El cometa Bernardinelli-Bernstein proporciona una pista valiosísima de la distribución de tamaño de los cometas en la Nube de Oort y, por lo tanto, su masa total. Las estimaciones de la masa de la Nube de Oort varían ampliamente, alcanzando hasta 20 veces la masa de la Tierra.
¿Dónde había estado este cometa?
El cometa ha estado caminando hacia el Sol durante más de un millón de años. Proviene del hipotético lugar de anidación de billones de cometas, llamado Nube de Oort.
La NASA cree que la nube difusa tiene un borde interior de dos mil y cinco mil veces la distancia entre el Sol y la Tierra, y que su borde exterior podría extenderse, al menos, hasta una cuarta parte de la distancia de las estrellas más cercanas a nuestro Sol, el sistema Alpha Centauri.
Los cometas de la Nube de Oort en realidad no se formaron tan lejos del Sol; fueron arrojados fuera del sistema solar hace miles de millones de años por una especie de “juego de pinball” gravitacional entre los planetas exteriores masivos, cuando las órbitas de Júpiter y Saturno aún estaban evolucionando.
- Los cometas lejanos solo viajan de regreso hacia el Sol y los planetas si sus órbitas distantes se ven perturbadas por el tirón gravitacional de una estrella.
Según los expertos, el cometa Bernardinelli-Bernstein se dirige hacia la Tierra a 35 mil kilómetros por hora desde el borde del Sistema Solar, sin embargo, nunca logrará acercarse a más de mil 600 millones de kilómetros del Sol, una distancia un poco más lejana que la existente entre Saturno y el astro rey. Y eso no sucederá hasta el año 2031.