En este Día Mundial del Agua 2022 es importante recordar qué es la huella hídrica y considerar qué se puede hacer para disminuir su incremento mediante acciones más amigables con el planeta.
El agua es uno de los recursos naturales más explotados por los humanos y el aumento de su escasez ha despertado alertas desde años atrás en todo el mundo. Una previsión de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) apunta que para la Ciudad de México quedaría agua sólo para 40 años más.
¿Qué es la huella hídrica y por qué su incremento daña al planeta?
Más allá de nuestras actividades cotidianas como bañarnos, lavar los trastes o regar las plantas, el mayor consumo de agua por individuo se registra en los productos y servicios que usamos a diario.
De acuerdo con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), la huella hídrica es un indicador de toda el agua que utilizamos en nuestra vida diaria; para producir nuestra comida, en procesos industriales y generación de energía, así como la que ensuciamos y contaminamos a través de esos mismos procesos.
El uso doméstico del agua representa sólo el 4% de lo que en realidad utilizamos de este líquido todos los días. El 96% restante pertenece a los servicios, actividades y comidas de cada persona; este consumo conocido como “agua virtual” es indirecto y su uso requiere de miles de litros.
La huella hídrica considera únicamente el agua dulce y este concepto se encuentra muy ligado al de agua virtual, ya que se refiere al agua utilizada en la creación de un producto (“el contenido de agua virtual”).
Todo lo que una persona come, bebe y utiliza representa su huella hídrica y la mayor parte del agua que consume esta ligada al consumo de productos agropecuarios.
¿Sabías que para un litro de carne pueden utilizarse unos 15 mil litros de agua?
La huella hídrica de una vaca, para el consumo de carne, es de 3 millones 100 mil litros. El sistema de producción de carne, toma en promedio tres años antes de que el animal sea sacrificado para producir unos 200 kg de carne deshuesada. De ahí que, cada vaca consume…
- Cerca de mil 300 granos como trigo, avena, cebada y maíz, chícharos secos, arina de soya y otros granos pequeños
- 7 mil 200 kilos de forrajes: pastos, heno seco, etc…
- 24 metros cúbicos de agua para beber
- 7 metros cúbicos de agua para mantenimiento
Con base en lo anterior, para producir un kilo de carne vacuna deshuesada se usan más 15 mil litros de agua en promedio.
Según la Conagua, esta cantidad de agua se requiere para la producción de los siguientes alimentos:
- 1 papa (100 gramos): 25 litros
- 1 manzana (100 gramos): 70 litros
- 1 jitomate (70 gramos): 13 litros
- 1 rebanada de pan (30 gramos): 40 litros
- 1 huevo (40 gramos): 135 litros
- 1 bolsa de papas fritas (200 gramos): 185 litros
- 1 hamburguesa (150 gramos): 2 mil 400 litros
- 1 vaso de leche (200 mililitros): 200 litros
- 1 vaso de cerveza (250 mililitros): 75 litros
- 1 vaso de jugo de manzana (200 mililitros): 190 litros
- 1 vaso de jugo de naranja (200 mililitros): 170 litros
Una alimentación sustentable y más acciones para disminuir la huella hídrica
Los datos anteriores dan muestra que una alimentación basada más en frutas y verduras tiene un impacto ambiental menor que el consumo de carne.
Por ello, una de las acciones para registrar una menor huella hídrica en los hogares es priorizar una dieta con alimentos que requieren menos agua como el pescado, las frutas y verduras.
Toma en cuenta que el desperdicio de alimentos también tiene un impacto en la huella hídrica, debido a la cantidad de agua que se usó en su proceso
Otras acciones que pueden frenar el incremento de la huella hídrica son:
- Cerrar la llave cuando te cepillas los dientes
- No dejar caer el agua si no la estás usando
- Colocar una cubeta para rescatar el agua que cae de la regadera antes de que se caliente
- Reutilizar el agua de hervir alimentos para regar plantas
- Usar la lavadora completamente llena
La huella hídrica en la industria textil también es una de las más elevadas. Para la ropa y el calzado suelen invertirse grandes cantidades de litros de agua como:
- Un kilo de algodón requiere unos 10 mil litros
- Una camiseta de algodón (250 g): 2 mil 500 litros
- Un pantalón de mezclilla: 10 mil litros
- Unos tenis: 4 mil 400 litros
Para reducir el impacto de la huella hídrica de estos productos es recomendable alargar su vida útil, reusar y reciclar