En el marco del Día del Amaranto 2020 que se celebra este 15 de octubre, en Unotv.com te explicamos por qué este alimento generalmente conocido por su uso en la elaboración de dulces tradicionales es reconocido como un superalimento, debido a sus múltiples beneficios a la salud.
¿Qué es el amaranto y por qué es un superalimento?
El amaranto es un pseudocereal, esto significa a que no forma parte de la familia de los cereales, pero sus usos y propiedades son similares a las de estos.
De acuerdo con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sagarpa), gracias a todos los componentes que posee el amaranto, la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos lo describió como el mejor alimento de origen vegetal para el consumo humano.
- El amaranto es uno de los 36 cultivos más prometedores del mundo.
El amaranto representa una gran fuente de proteínas, minerales, ácido fólico, niacina, calcio, hierro, fósforo y vitaminas A, B, C, B1, B2 y B3; destacando sobre sobre otros cultivos.
Según la Asociación Mexicana del Amaranto (AMA), esta semilla contiene el doble de proteína que el maíz y el arroz, y de 60 a 80 por ciento más que el trigo.
Además tiene un alto contenido en fibra, el amaranto posee aceites grasos esenciales que ayudan a la protección cardiovascular, los cuales son igual de efectivos que los obtenidos del hígado de tiburón, según estudios.
Debido al alto valor alimenticio y nutricional que posee el amaranto de forma natural sin necesidad de ser sometido a ningún proceso extra, es que se le considera un superalimento.
- Los superalimentos son en su mayoría alimentos crudos que son más densos en nutrientes que los alimentos procesados y cocinados.
“El amaranto se puede utilizar integralmente como un recurso para proporcionar a la población los requerimientos proteicos y de calorías, los cuales en la actualidad se obtiene tan sólo de 20 especies vegetales como el trigo, arroz, mijo, sorgo, papa, fríjol, soya, azúcar, y otros”, dice la AMA.
¿Dónde encontramos el amaranto?
Con un superalimento como el amaranto es posible producir: harinas, granolas, tamales, atoles, galletas, bebidas y las famosas alegrías.
Además, el resto de la planta se puede utilizar para hacer sopas, forraje para animales y abono.
Otros usos dados al amaranto son los medicinales, la AMA señala que “estudios han demostrado que una gelatina con alto contenido de fibra, elaborada con base de amaranto, nopal y harina de brócoli, podría prevenir el cáncer de colon”.
Y que “por las propiedades nutritivas y los componentes del amaranto es recomendado para prevenir y ayudar a curar afecciones como osteoporosis, diabetes mellitus, obesidad, hipertensión arterial, estreñimiento y diverticulosis, insuficiencia renal crónica, insuficiencia hepática, encefalopatía hepática, alimento apto para celíacos, dieta para personas con autismo”.
También se recomienda a pacientes con problemas bucodentomaxilares, geriátricos, desnutridos y oncológicos, en dietas hiperenergéticas e hiperproteícas; hipocolesterolemiante. Por su contenido energético también es beneficioso para pacientes con requerimientos calóricos elevados.
Amaranto, un superalimento espacial
En 1985, el astronauta mexicano Rodolfo Neri Vela hizo que el amaranto fuera parte parte de la dieta de los astronautas ya que es fácil de digerir, es ligero y nutritivo.
Desde entonces, este pseudocereal es cultivado en los transbordadores espaciales trayendo como beneficios no sólo comida, sino que también ayuda a absorber el dióxido de carbono, produce oxígeno y agua.