Investigadores del Centro Polaco de Arqueología Mediterránea de la Universidad de Varsovia descubrieron el cuerpo de un hombre de mil 300 años de antigüedad en Sudán, que tiene un tatuaje de “Cristo”.
Se trata de un tatuaje religioso medieval extremadamente raro que se encuentra en el pie derecho de un individuo, que se presume es un hombre. El tatuaje representa un cristograma y las letras griegas “alfa” y “omega”.
Un cristograma es un símbolo religioso que combina las letras griegas “chi” y “rho” para formar una abreviatura de monograma del nombre de Cristo. Las letras “alfa” y “omega”, la primera y la última letra del alfabeto griego, representan la creencia cristiana de que Dios es el principio y el fin de todo, indicaron los expertos en un comunicado de prensa.
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“Fue una gran sorpresa ver de repente lo que parecía ser un tatuaje cuando estaba trabajando con la colección Ghazali. Al principio no estaba seguro, pero cuando se procesaron las imágenes y el tatuaje fue claramente visible, se disiparon todas las dudas iniciales”, indicó Kari A. Guilbault quien investiga el hallazgo.
¿Qué se sabe del hombre del tatuaje de “Cristo?
Si bien el tatuaje indicaba que el individuo era cristiano, no está claro si era un monje, dijeron los bioarqueólogos Robert Stark y Kari Guilbault a la revista especializada Live Science. Sin embargo, señalaron que la ubicación del tatuaje en el pie derecho es intrigante, ya que a Cristo le pudieron haber clavado un clavo en este lugar durante su crucifixión.
El descubrimiento se dio en un yacimiento monástico medieval de Ghazali es uno de los yacimientos arqueológicos mejor conservados de Sudán, situado en la región de Wadi Abu Dom del desierto de Bayuda, en la provincia norteña de Sudán, a unos 20 km de la moderna ciudad de Karima.
La datación por radiocarbono indica que la persona vivió en algún momento entre 667 y 774. En ese momento, el cristianismo era la religión principal en la región y, por lo tanto, “muy común”, dijeron Stark y Guilbault, quienes creen que el individuo probablemente tenía entre 35 y 50 años cuando murió.
De acuerdo con los investigadores, la documentación de este tatuaje de Ghazali plantea numerosas preguntas sobre la práctica del tatuaje y los signos de fe en la Nubia medieval.
Los restos humanos son estudiados actualmente por Robert J. Stark y sus colegas, quienes están investigando la procedencia de la población local y tratando de aprender cómo era la vida de las personas que fueron enterradas allí.