Una investigadora de la Universidad de Utrecht en Países Bajos descubrió una megaplaca tectónica masiva y previamente desconocida del tamaño de un cuarto del Océano Pacífico.
Se trata de la megaplaca tectónica llamada por los científicos como “Pontus”. La cual aunque había sido predicha 10 años antes por investigadores de la misma universidad; fue descubierta hasta ahora por la geóloga Suzanna van de Lagemaat, quien analizó los datos geológicos.
Para lograrlo, Van de Lagemaat reconstruyó las placas perdidas mediante investigaciones de campo y de datos de los cinturones montañosos de Japón, Borneo, Filipinas, Nueva Guinea y Nueva Zelanda.
La experta descubrió que los restos oceánicos localizados en el norte de Borneo debían pertenecer a la placa de la que se sospechaba desde hacía mucho tiempo y que los científicos han llamado “Pontus”.
La investigación de Van de Lagemaat también demostró que un único sistema tectónico de placas coherente se extendía desde el sur de Japón hasta Nueva Zelanda, y debe haber existido durante al menos 150 millones de años. Éste también es un nuevo descubrimiento en este campo.
¿Cómo fue posible saber de la existencia de esta megaplaca tectónica?
De acuerdo con la experta, grandes placas oceánicas del pasado geológico han desaparecido en el manto terrestre mediante subducción, dejado fragmentos de roca escondidos en cinturones montañosos.
Gracias a estos restos, Van de Lagemaat reconstruyó por primera vez los movimientos de las placas actuales en la región entre Japón y Nueva Zelanda.
Los datos geológicos revelaron cuán grande era el área de placas que debieron haber desaparecido en la actual región del Pacífico occidental.
El hallazgo de la megaplaca tectónica “Pontus” es de suma importancia ya que comprender los movimientos de las placas tectónicas que forman la rígida capa exterior de la Tierra es esencial para comprender la historia geológica del planeta.