Entre los fragmentos de un antiguo mural mesoamericano, un grupo de arqueólogos en Guatemala descubrieron la evidencia más antigua de un calendario maya, según un estudio publicado en la revista Science Advances.
En la Pirámide de Las Pinturas, en el sitio arqueológico de San Bartolo en Guatemala, se encontró el pequeño glifo denominado “7 ciervos“, el cual simboliza una cabeza de ciervo debajo de dos puntos y una línea, que representaría el número siete.
Esta primera anotación representaría una de las fechas del calendario ritual de 260 días que usaron los mayas y que algunos comunidades de la región continúan ocupando.
La anotación se escribió en algún momento entre el 200 y el 300 a. C., según el análisis de radiocarbono. El fragmento pertenece a un mural descubierto en el interior de la pirámide entre 2002 y 2012.
La Pirámide de Las Pinturas alberga varias capas de la historia maya, cada una apilada una encima de la otra y que se remonta aproximadamente al año 800 a.C. Esta edificación fue la última estructura que se construyó en el sitio y es famosa por albergar murales pintados que representan la mitología maya.
Alrededor de siete mil fragmentos de murales, algunos tan pequeños como una uña y otros de hasta 20 x 40 cm, se han encontrado en San Bartolo, explicó la antropóloga Heather Hurst. Y agregó que se trata de “un rompecabezas gigante”.
Lo que se sabe del calendario maya de 260 días
La sociedad maya se regía por tres calendarios: el solar, de 365 días; el ritual, de 260, al cual pertenece el fragmento descubierto; y la llamada cuenta larga, que cuenta los ciclos transcurridos desde el año 3114 a.C., fecha de la creación del mundo en la mitología mesoamericana.
En el calendario maya de 260 días, también llamado tzolk’in, los días individuales se nombran del 1 al 20 en un orden establecido y se repiten 13 veces al año.
El día 7 Ciervo, por ejemplo, es seguido por un día 8 Conejo, un día 9 Agua y un día 10 Perro.
El calendario fue uno de los logros de una cultura que también desarrolló un sistema de escritura que abarca 800 glifos. Los mayas construyeron templos, pirámides, palacios y observatorios y se dedicaron a la agricultura sofisticada sin utilizar herramientas de metal ni la rueda.
Por su parte, San Bartolo fue un centro regional durante el período preclásico maya, que se extendió desde aproximadamente el 400 a. C. hasta el 250 d. C. Esta era sentó las bases para el florecimiento de la cultura maya durante el período Clásico subsiguiente, conocido por ciudades como Tikal en Guatemala, Palenque en México y Copán en Honduras.
Algunas comunidades mayas de hoy todavía usan el calendario antiguo.
“Este sistema de calendario ha durado al menos 2200 años, mantenido por los mayas durante tiempos de cambios increíbles, estrés y tragedia”, dijo el profesor de arte y escritura mesoamericanos de la Universidad de Texas, David Stuart.
Otro descubrimiento maya
Los primeros días de abril el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) colaboró en el hallazgo de las ruinas de una ciudad maya hundida en el fondo del lago Atitlán, en Guatemala.
Los investigadores mexicanos colaboraron con arqueólogos de países como Bélgica, Francia, España y Argentina, quienes apoyaron al Ministerio de Cultura de Guatemala para realizar buceos con el objetivo de georreferenciar la zona.
