La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) anunció nuevas recomendaciones para empujar a la agroindustria a reducir la sal en sus productos, un problema de salud pública en un país donde la mitad de la población sufre hipertensión.
La guía tiene como nombre “Orientación para la industria: metas voluntarias de reducción de sodio”. En el documento, la FDA indica que es una herramienta para establecer metas voluntarias, es decir, para que cada persona las adapte de forma individual y responsable. Las metas están creadas para desarrollarse en una duración estimada de 2,5 años.
El objetivo por alcanzar en un plazo de dos años y medio consiste en reducir el consumo promedio de sodio de 3.400 mg/diarios a 3.000 mg/diarios, es decir, 12% menos, explicó en un comunicado la FDA.
¿Cómo disminuir el consumo de sal?
- Evite incluir comer alimentos con alto consumo de sodio. Algunos de estos son: pizzas, sándwiches, tacos.
- Es importante tener en cuenta que los restaurantes también trabajan con productos procesados, que contienen niveles altos de sodio. Por eso al asistir a un restaurante y en el menú no aparece la información nutricional, se debe solicitar estos datos para conocer cuáles son las opciones con menor cantidad de sodio.
- Al ir de compras se debe observar y leer detalladamente la información nutricional de los productos envasados que se planea comprar. Luego de esto, comparar y escoger el que tenga menos sodio.
- En la cocina, se pueden utilizar otros ingredientes diferentes a la sal. La FDA recomienda probar mezclas de hierbas naturales y especias para condimentar los alimentos.
- A diario, evitar sobrepasar el consumo máximo de sal. Es importante no consumir más de 2.300 gramos al día, lo equivalente a una cucharada pequeña de sal.
En total, 163 categorías de productos serán afectadas por estas directrices, desde los platos congelados a los productos para bebés, pasando por las cadenas de comida rápida.
Según la FDA, los estadounidenses consumen 50% más sodio que las dosis recomendadas, y 95% de los niños de entre dos y 13 años rebasan el límite recomendado.
Este sobreconsumo provoca enfermedades como la hipertensión y enfermedades cardiovasculares, obesidad y diabetes.
El plazo de aquí a 2024 da suficiente tiempo a los industriales para crear nuevas recetas y permite a los consumidores modificar sus gustos en materia de alimentación, según la FDA.
“El sodio juega un papel en la tecnología y seguridad alimenticia, aceptamos que los cambios no ocurrirán de un día para el otro”, explicó Woodcock.
Más de un centenar de países tienen programas de reducción de sodio y numerosas multinacionales ya han colocado en otros mercados los mismos productos que venden en Estados Unidos, pero con menos sodio.
Además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) también señaló que el elevado consumo de sodio aumenta la posibilidad de tener hipertensión arterial y presentar enfermedades cardíacas como cardiopatía y accidente cerebrovascular. En la alimentación, la sal es la mayor fuente de sodio. Según la OMS las personas consumen a diario de 9 a 12 gramos de sal, eso significa el doble de la ingesta máxima recomendada por los médicos.
Si las personas consumen menos de 5 gramos diarios de sal, disminuyen el riesgo de tensión arterial y enfermedades cardíacas. El alto consumo de sal es uno de los factores que preocupa a la OMS, debido a que produce grandes afectaciones a la salud y puede causar la muerte.
Por esto, los Estados miembros de la OMS acordaron que una de las metas a 2025 es reducir en un 30% el consumo de sal en la población mundial.