Un equipo de investigadores japoneses reveló cómo las plantas pueden comunicarse entre sí, recibiendo y respondiendo “mensajes” para protegerse de amenazas. Todo, gracias a técnicas de imágenes en tiempo real.
Con ayuda de un microscopio de fluorescencia, los científicos lograron captar en video las comunicaciones que mantienen las plantas entre sí a través de los compuestos orgánicos volátiles que emiten.
Esta innovadora configuración visualizó ráfagas de fluorescencia que se propagaban en una planta de mostaza Arabidopsis thaliana después de la exposición a los COV emitidos por las plantas dañadas por insectos.
Según los investigadores, las plantas pueden captar dichos compuestos con ayuda de sus estomas, los cuales funcionan como una nariz que ayuda a identificar los compuestos en los espacios intermedios de los tejidos de las hojas.
¿Cómo fue posible saber esto?
Para lograr captar la comunicación entre plantas fue necesario bombear compuestos orgánicos volátiles emitidos por plantas alimentadas por orugas a plantas vecinas no dañadas. Para posteriormente combinar un sistema de imágenes fluorescentes en tiempo real.
Generalmente esta comunicación etérea entre plantas se encuentra oculta a la vista del ojo humano. Sin embargo, desempeña un papel fundamental a la hora de proteger a tiempo las plantas vecinas de amenazas inminentes, dijeron los expertos, que publicaron sus hallazgos en la revista especializada Nature Communications.
¿Cómo se comunican las plantas?
Las plantas emiten compuestos orgánicos volátiles a la atmósfera cuando sufren algún tipo de daño mecánico o un ataque de insectos. Dichos compuestos son identificados por otras plantas que no han sufrido daños, como señales de peligro. Provocando que activen respuestas de defensa contra amenazas futuras.
Este fenómeno de comunicación aérea entre plantas se documentó por primera vez en 1983 y desde entonces se ha observado en más de 30 especies de plantas diferentes.