Las canas llegan a estar asociadas a la vejez o la herencia, pero no siempre éstas salen por el paso del tiempo, ya que existen otros procesos que llevan que la cabeza se llene de los llamados “hilos de plata”. La doctora Rosa María Ponce, dermatóloga y académica de la Facultad de Medicina de la UNAM, explica por qué salen y lo que no debes hacer con ellas.
¿Por qué salen la canas?
De acuerdo con la UNAM, el tono grisáceo de un cabello es como la crónica anunciada de una cana. El cabello contiene estructuralmente “pequeñas burbujas” que por un proceso de oxidación pierden la melanina, oscura en gente morena y más clara en pelirroja o rubia.
El color amarillo de las canas es porque la decoloración no es uniforme: al final de la oxidación quedan remanentes cafés de la negra melanina. Y los pelos no quedan blanquecinos completamente decolorados.
Lo amarillo también se incrementa por el uso de champús que llevan derivados del alquitrán de hulla.
Canas asociadas a patologías
Aunque no todas las canas que salen son un signo de vejez o por herencia, la doctora Rosa María Ponce explica que la aparición de alguna de ellas están asociadas a patologías, como:
- El vitiligo causa decoloración del cabello. Aparecen zonas blancas en la cabeza, que no son canas como tal.
- El síndrome de Giscelli es una enfermedad cutánea que se caracteriza por el brillo plateado del cabello. Se debe a que afecta a las plaquetas y a la deficiencia en la absorción de aminoácidos.
- Nevo acrómicos. Son lunares o zonas de la piel cabelluda y corporal sin pigmentación. Son de nacimiento.
- Trastornos alimenticios. La anorexia, la bulimia y el veganismo pueden provocar un grado de desnutrición y por consecuencia diferentes tonalidades en el pelo.
Canas prematuras
Las canas prematuras pueden aparecer en la niñez (por vitiligo y nevo acrómico), en la adolescencia y en la juventud. A los 30 años hay quien tiene la cabeza canosa y no necesariamente es por enfermedad. “Nuestros ancestros no tenían canas, pero nosotros somos mestizos”. También hay personas de 50 años que no tienen canas.
El mechón de Tongolele, el de Miguel Aceves Mejía, y el de Hernán Hernández, de Los Tigres del Norte, son lunares, no necesariamente asociados con una enfermedad.
Esos mechones blancos encima de la frente pueden estar asociados a poliosis, condición no grave de salud. Puede ser adquirida (por el consumo de algún medicamento) o hereditaria (piebaldismo y síndrome de Waardenburg con heterocromía del iris: ojos de diferente color).
Nunca hagas esto con tus canas
“Nunca combines productos metalizados (esos que se anuncian: tiña sin teñir o no ensucia), porque, advierte la dermatóloga de la UNAM, contienen un pigmento metálico que va acumulando partículas y si se combina con un tinte real se puede fragmentar el pelo o generar dermatitis por contacto en el cuero cabelludo.
Es demasiado agresivo, pues contiene amoniaco, peróxido o bien parafenilandiamina, que son los alergizantes como cualquier otro de los tintes. Además, fragmentan el pelo al desnaturalizarlo de sus proteínas. Quedan flexibles como ligas.
Hasta hoy, no hay nada que quite de raíz y definitivamente las canas. Ni productos antioxidantes con derivados de péptidos de pescado ni el suplemento oral que promocionan algunas aerolíneas americanas como “aléjate del gris”.
El teñido de canas puede ser con tintes permanentes o semi permanentes, o con “lápices spray” que solamente es un colorante.