Después de que el embajador ucraniano en Estados Unidos declarara que Rusia ha hecho uso de las llamadas bombas de vacío o bombas termobáricas durante la invasión a su país, los temores sobre un ataque nuclear han crecido en todo el mundo. Pero ¿qué tipo de arma es ésta y por qué es llamada “el padre de las bombas”?
¿Qué es una bomba de vacío o bomba termobárica?
Las bombas termobáricas, también conocidas como “bombas de vacío”, “explosivo de aire/combustible” o FAE II son dispositivos que dispersan en el aire una nube pulverizada de combustible mediante un aerosol, cuya combustión se activa posteriormente con un detonador, indica una investigación realizada por Gonzalo de Salazar, de la Unidad de Investigación sobre Seguridad y Cooperación Internacional de la Universidad Complutense de Madrid, España.
De acuerdo con el experto, la explosión de este tipo de bombas produce una fuerte onda expansiva que causa graves daños en torno a su epicentro, extendiéndose en un radio de centenares de metros, destruyendo prácticamente toda la zona próxima.
- La onda expansiva de una bomba termobárica tiene una duración más larga que la de un explosivo de alta potencia como el TNT y puede alcanzar una temperatura de hasta tres mil grados centígrados. En espacios cerrados y subterráneos su efecto muy elevado.
Según la investigación, los combustibles usados más frecuentemente para fabricar este tipo de armas son el óxido de etileno y el óxido de propileno, substancias tóxicas que resultan letales incluso si no hay deflagración. Una nube no detonada actuaría como un arma química.
- El peso de las bombas FAE conocidas públicamente oscila entre 250 y 1.000 kg.
Este tipo de arma es más potente que un explosivo convencional de alta potencia, y según el autor de la investigación, no sólo destruye completamente la vegetación de la zona, sino también el equipo de combate, campos de minas, centros de comunicación, fortificaciones militares y personal.
Esto se debe a que a que produce fuertes variaciones de presión de las que resulta imposible escapar, de hecho, De Salazar asegura que “en áreas urbanas es muy difícil limitar a los combatientes del efecto letal, ya que éste actúa igualmente sobre civiles que buscan refugio en el interior de edificios, sótanos y búnkers”.
Además que, “el efecto de incineración que produce una bomba termobárica resulta ‘adecuado’ para atacar depósitos de armas biológicas reduciendo el riesgo de propagación de los agentes nocivos.
El investigador también sostiene que “esta arma puede facilitar el aterrizaje posterior de helicópteros al ser empleada en una superficie con vegetación, dada su elevada capacidad destructiva en el epicentro de la deflagración, que además no causa un cráter”.
¿Cómo funcionan?
Las bombas termobáricas funcionan en dos fases; en una primera fase, un misil o una bomba de caída libre compuesto por un contenedor de combustible líquido y dos cargas explosivas se lanza desde un avión.
La primera carga explosiva abre el contenedor a determinada altura y el combustible se dispersa con un aerosol, formando una nube que se mezcla con el aire.
Posteriormente, una segunda carga explosiva actúa como detonador de la nube de combustible y aire produciendo una deflagración.
“El padre de todas las bombas”: la bomba termobárica
En 2007, el gobierno de Vladimir Putin presentó al mundo la Bomba Aérea de Vacío de Potencia Aumentada (AVBPM, por sus siglas en ruso), la cual dijo haber probado y que es comúnmente conocida como “el padre de todas las bombas”.
Este nombre fue adoptado después de que un sitio de noticias ruso dijera a modo de burla “niños, conozcan al padre de todas las bombas”, al dar a conocer la bomba anunciada por Putin.
Y es que la burla hecha por el medio ruso, hacía referencia de la bomba usada por Estados Unidos en Afganistán y la cual fue llamada “madre de todas las bombas”.