Astrofísicos de la Universidad de Valencia y otros centros europeos han detectado por primera vez en la historia un rayo azul desde el primer microsegundo que nace en las nubes de la Tierra hasta su propagación en la estratosfera.
Esta es la primera vez que se ha detectado y caracterizado de forma completa uno de estos rayos azules, determinando su posición, duración, evolución y velocidad, informó la agencia de noticias del Ministerio de Ciencia e Innovación de España.
“Se trata de erupciones de plasma que se originan a 16 km de altura desde la nube y parten, en cuestión de microsegundos, hacia las zonas más altas de la estratosfera”, explicó Víctor Reglero, catedrático de Astronomía y Astrofísica e investigador del Image Processing Laboratory (IPL) de la Universidad de Valencia.
Los rayos azules, jets o chorros muy azules e intensos ascienden desde la nube hacia las partes más altas de la atmósfera. Se originan a 10 o 15 km de altura desde las nubes y suben por encima de ellas, ascendiendo por la atmósfera.
El descubrimiento fue realizado desde la Estación Espacial Internacional (ISS por sus siglas en inglés) por investigadores de Dinamarca, Noruega y España debido a que estos raros sucesos sólo pueden ser visibles desde el espacio.
Las observaciones se realizaron en febrero de 2019 con el instrumento Atmosphere Interactions Monitor (ASIM) instalado en la ISS el cual registró cinco erupciones muy violentas cerca de la isla de Nauru en el Pacífico Central.
Sin embargo, fue la tercera de las erupciones la que ha ofrecido el resultado más singular, ya que tuvo una duración de 20 microsegundos, una señal cien veces más intensa de lo habitual en el rango del llamado fotómetro azul y nada en el fotómetro rojo.
Los científicos han deducido que la imagen tiene forma de cono y que su apertura va aumentando a medida que la emisión progresa en sus 196 microsegundos de duración y sube a la atmósfera hasta llegar a los 56 km de altura.
El hallazgo publicado en la revista especializada Nature, puede ayudar a los estudios sobre el circuito eléctrico global de la atmósfera y el calentamiento de sus capas altas.