Un grupo de hackers se quedó a nada de hacer historia, pues una falta de ortografía les quitó la gloria...
¿Por qué?
Los ciberdelincuentes presuntamente lograron entrar al sistema de banco de la Reserva Federal de Nueva York y empezaron a hacer transferencias; movían dinero desde el Banco de Bangladesh a cuentas en paraísos fiscales en casinos de Sri Lanka o Filipinas.
Todo iba viento en popa, habían realizado cuatro transacciones con valor de 81 millones de dólares, pero en la quinta vino el error.
Los hackers escribieron como destinatario del dinero a:
"Shalika Fandation", en lugar de Foundation (en inglés, fundación).
Esta falla prendió las alarmas y evitó que se "embolsaran" 870 millones de dólares más.
De haber logrado su cometido, estos individuos hubieran superado el famoso robo al centro de diamantes de Amberes, considerado el mejor planificado de todos los tiempos y donde los ladrones lograron 50 millones de dólares en las preciosas piedras.