El Gobierno de México condenó la toma de rehenes y los ataques perpetrados por un grupo de hombres armados en Bangladesh, que ocasionó la muerte de personas de diversas nacionalidades, entre ellos ciudadanos de Bangladesh, India, Italia, Japón y Estados Unidos.
México expresó sus condolencias y solidaridad a estos gobiernos, al pueblo de Bangladesh, así como a los familiares de las víctimas de estos hechos violentos, al tiempo que reiteró su rechazo al terrorismo en todas sus formas y manifestaciones.