Donald Trump, quien se encuentra en franca caída en el sondeo de intención de voto para las elecciones presidenciales en Estados Unidos, intentó minimizar el jueves el costo personal de una eventual derrota ante Hillary Clinton en noviembre.
"Si en 90 días fracaso porque de alguna manera soy políticamente correcto, cuando se supone que soy el candidato inteligente e incluso tengo muchas buenas ideas, no hay problema", dijo durante una entrevista telefónica.
"Al final, o esto funciona o me tomaré unas largas vacaciones", dijo el multimillonario empresario, que entre otras propiedades tiene un club privado en West Palm Beach, Florida, Estados Unidos en el que gusta pasar algún tiempo.
El candidato republicano, de 70 años, preparó la semana pasada el terreno para una eventual derrota al declarar que existía el riesgo de que le robaran la victoria, "Créanme, habrá que estar atentos el 8 de noviembre, porque estas elecciones estarán amañadas", afirmó.