Este viernes, los japoneses detuvieron sus actividades al comienzo de la tarde para cumplir un minuto de silencio en homenaje a los 18.500 muertos del terremoto y tsunami de 2011.
El emperador Akihito, su esposa Michiko y el primer ministro Shinzo Abe, inclinaron sus cabezas en símbolo de homenaje a las 14h46 locales (05h46 GMT).
El 11 de marzo de 2011 exactamente un terremoto de 9 grados se produjo en el Océano Pacífico.
El tsunami posterior mató a 18.500 personas y provocó además una fuga en la central atómica de Fukushima desatando el mayor desastre nuclear en un cuarto de siglo.