La cantidad de gases de efecto invernadero presente en la atmósfera alcanzó un nuevo máximo durante 2014, por lo que continúa el aumento incesante que alimenta el cambio climático, advirtió el último informe de la Organización Mundial de la Meteorología (OMM).
En 2014, la concentración atmosférica de CO2, principal gas de efecto invernadero de larga duración, alcanzó 397.7 partes por millón (ppm).
Se entiende por emisión la cantidad de gas que va a la atmósfera y por concentración la cantidad que queda en la atmósfera después de las complejas interacciones que tienen lugar entre la atmósfera, la biosfera, la criosfera y los océanos.
Las actividades humanas, como la quema de combustibles fósiles, han alterado el equilibrio natural y en 2014 la concentración media mundial de CO2 alcanzó el 143 % de la media en la era preindustrial, siendo de 397.7 ppm.