Los cuidadores de los osos polares del zoológico de San Diego, en el sur de California, Estados Unidos, se compadecieron de los pobres animales que sufrían por la falta de frío y les regalaron 26 toneladas de nieve.
Los osos Kalluk, Tatqiq and Chinook pudieron disfrutar de un invierno con nieve como si estuviesen en el Ártico, a pesar de que la temperatura promedio del invierno en California es de 15 o 20 grados.
Como un plus para su regalo, los osos recibieron frutas y verduras que habían sido esparcidas por la nieve, escondidas como si se tratase de presas para que ellos escarben como si estuviesen en su hábitat natural.