Una investigación del gobierno de Bolivia sobre el accidente de avión que dejó 71 personas muertas -la mayoría, miembros del club de futbol Chapecoense de Brasil- el pasado 28 de noviembre en Colombia, concluyó este martes que el piloto y la aerolínea fueron directos responsables.
El Avro RJ85, operado por la empresa boliviana LaMia, se estrelló en las cercanías de Medellín cuando transportaba a gran parte del club Chapecoense, que se dirigía a disputar la Final de la Copa Sudamericana.
La investigación también estableció que Celia Castedo, funcionaria de la Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea de Bolivia y quien autorizó el vuelo a pesar de las irregularidades presentadas, "incumplió sus deberes y eso también amerita una sanción".
Tras conocerse el accidente, la funcionaria huyó a Brasil, donde pidió protección a las autoridades de ese país.
El ministro boliviano aclaró que esta investigación está al margen de la que llevan los fiscales de una comisión tripartita de Bolivia, Brasil y Colombia.
El gerente de LaMia, Gustavo Vargas Gamboa, y su hijo, Gustavo Vargas Villegas, fueron arrestados por las autoridades bolivianas y están a la espera de un juicio.