La Secretaría Estatal de Seguridad Pública (SESP) de Quintana Roo desplegó sus protocolos de máxima seguridad para controlar a un grupo de internos de la cárcel de Cancún que no estuvieron de acuerdo por el traslado de tres de sus compañeros.
El incidente se reportó en el área denominada "I" y obligó a la activación del Código Rojo de máxima seguridad.
Eso implicó la participación de elementos de las Policías Municipal, Estatal y Ministerial que trabajaron de manera coordinada para controlar la situación de manera inmediata.
- De acuerdo con el reporte, no se registraron internos lesionados "y muchos menos fugas".
La dependencia señaló que el traslado se desarrolló a pesar del clima de tensión.